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Muchos se ilusionan con quemar toda la grasa y eliminar todo el alcohol que bebieron durante las últimas Fiestas Patrias tomando jugos o batidos especiales llamados "desintoxicantes" o "detox", pero la realidad es otra.

La verdad hay bastante mitos que rodean esta práctica, muy usual en las personas después de las festividades -como el 18 o el Año Nuevo- donde suelen comer y beber más de lo acostumbrado.

Para poner luz sobre este tema, la nutricionista de nuestro CESFAM Dr. Alfonso Leng, Alejandra Orellana, nos ayuda a distinguir entre los mitos y la realidad.

MITO: Los jugos y batidos de verduras desintoxican nuestro organismo

Las dietas "detox" en realidad no son necesarias para esta función ya que en nuestro organismo son tanto el hígado como los riñones los que se encargan de depurar y eliminar las toxinas de nuestro cuerpo. 

MITO:Puedo bajar de peso fácilmente tomando jugos de verduras

Si bien un jugo de apio o de zanahoria son muy nutritivos y hacen bien ya que permiten incluir estos alimentos en la dieta, una alimentación basada casi exclusivamente en ese tipo de preparaciones no es sostenible en el tiempo, ya que aportan muy pocas calorías y restringen grupos alimentarios ( carnes, huevos, lácteos y cereales). Si bien en un principio se observa una baja de peso, hay que tener en cuenta que gran parte de esta pérdida tiene relación a que se pierde líquido y no grasa, por lo que es muy común observar posteriormente un efecto rebote.

Entonces ¿Qué podemos hacer para sentirnos más saludables después de esos días de fiesta?

Alejandra destaca 4 reglas fundamentales:

1.COMER MÁS FRUTAS Y VERDURAS

Incluir frutas y verduras enteras y no en forma de batidos, nos ayudará a obtener la mayor cantidad de beneficios que nos ofrecen, como son las vitaminas, minerales y fibra. Se sugiere consumir 5 porciones al día entre ambas, y no, no está prohibido consumir frutas de noche, ya que su aporte de calorías es el mismo independiente de la hora que se consuman. Es importante mencionar que cuando se exprime la fruta, la fibra se rompe, por lo cual uno ingiere principalmente carbohidratos simples, lo que podría finalmente afectar la glicemia o azúcar en la sangre. 

2.CUIDAR EL SUEÑO

Lo ideal para un sueño reparador es dormir 7-8 horas continuas.  Sí, suena fácil, pero la rutina diaria a veces lo impide o dificulta ¿Cómo ayudarnos? En la cena come liviano y trata de no hacerlo más allá de las 21:00 horas. Calcula al menos una hora para luego ir a dormir.

Otro factor importante es la exposición a las pantallas, ya sea la del computador, el celular o la televisión. Deja de mirarlas al menos una hora antes de ir a dormir, para que tu cerebro logre percibir que ya es de noche y que llegó el momento del descanso. 

Dormir entre 7 a 8 horas diarias y previo a la madrugada ayuda a mejorar la composición corporal ya que durante la noche se liberan hormonas que modulan las señales de hambre y saciedad. Además, reduce los procesos de estrés y mejora los estados de alerta y el estado de humor. La falta de sueño aumenta el riesgo de padecer obesidad, enfermedades del corazón e infecciones respiratorias.

3.TOMAR AGUA

El agua es un elemento esencial que permite el buen funcionamiento del organismo, y sus beneficios son varios, aumenta la energía, mejora la digestión, ayuda a mantener una piel más sana, sin embargo  solemos pasar muchas horas del día sin beber agua, y solo lo hacemos cuando sentimos sed, es decir, cuando ya empezamos a deshidratarnos.

Lo ideal es tomar al menos 2 litros de agua fresca por día.

4.ACTIVIDAD FÍSICA

Lo recomendado es al menos 3 veces por semana, con una intensidad de acuerdo con tu estado físico y resistencia. 

¡A propósito! En Providencia tenemos muchas alternativas para que desempolves las zapatillas y empieces a ejercitarte.