Providencia

¿Cómo funciona la filosofía de vida "basura cero"?

No se trata precisamente de reciclar o reutilizarlo todo, sino de generar la menor cantidad de basura posible.

La definición de Basura Cero, según la Alianza internacional Basura Cero “es un programa pragmático y a la vez visionario, que quiere emular los ciclos naturales y sostenible, por los cuales el resto de un organismo es un recurso para algún otro. Basura Cero significa diseñar y manejar productos y procesos con vistas a reducir el volumen, la toxicidad, preservar y recuperar recursos para evitar su eliminación. La implementación basura cero elimina la práctica de verte o emitir cualquier sustancia a los suelos, agua o aire que pueda representar amenaza al medio”.

En el mundo, hay muchas personas que practican un estilo de vida basura Cero, y una de las pioneras es Bea Johnson, activista ambiental, escritora y conferencista francesa, quien desde el año 2008 comenzó esta transición en el estilo de vida de ella y su familia, en donde a través de su blog y su libro Zero Waste Home o Desperdicio Zero, Bea comenzó un movimiento global y hoy viaja por todo el mundo dando charlas y talleres sobre su estilo de vida.

Es así como en el año 2018 nos visitó y dio una excelente charla magistral en el Hub Providencia, que fue organizada por la Municipalidad de Providencia y la Fundación Basura, donde ella hace hincapié en que una decisión personal, aunque pueda parecer muy pequeña, puede significar grandes cambios a nivel local y global.

Bea Johnson nos invita a aplicar las reglas de las «5 erres», en un orden lineal, y aprender que es posible vivir sin generar basura.

RECHAZA lo que no necesitas

En esta sociedad consumista, cuando compramos algo estamos aportando a la demanda para que se fabrique más. Y luego al traer estos productos a nuestros hogares, estos invaden nuestro espacio. Por este motivo, Bea decidió no aceptar más el plástico de un solo uso, tampoco los regalos corporativos (papelerías promocionales), las bandejas de comida del avión, o las tarjetas de presentación.

REDUCE a lo que realmente necesitas

Lo primero que hizo Bea en este ámbito fue eliminar lo que no estaba usando en su cocina: “¿Para qué necesitas dos palas de madera, o dos de cada cosa, cuando en realidad utilizamos uno a la vez?”.

En segundo lugar, eliminaron toda la ropa que no estaban utilizando. Bea menciona cómo utilizamos solo un 20% de nuestra ropa, y el 80% que sobra lo guardamos “por si acaso”. Eso por esta razón que Bea seleccionó solo las tenidas multifuncionales, de tal forma que con solo pocas piezas, puede crear hasta cincuenta distintos looks. Declara que hoy todo su clóset cabe en un bolso de mano.

REUTILIZAR, al comprar de segunda mano y usar el trueque

“Cuando mantenemos las cosas que no utilizamos en nuestros hogares, estamos previniendo que otras personas las usen”, comenta Bea en su charla. Al mismo tiempo, también menciona que es importante contribuir al mercado de segunda mano, para que existan más alternativas de compra y también más personas que compran solo de segunda mano.

RECICLAR solo lo que no se REUSA, REDUCE, Y REUTILIZA

El reciclaje no es la primera en la lista, ya que no todos los productos son reciclables, y al mismo tiempo, no todos pueden ser reciclados infinitamente. Tal es el caso del plástico, que se recicla en promedio solo dos veces. Aunque es una buena práctica, no debiéramos quedarnos solo en esto, ya que igual estamos consumiendo productos que requirieron de energía para su fabricación.

La última acción es “ROT” O COMPOSTAR

Esto significa que toda la materia orgánica de la casa puede descomponerse en el compost de la casa. Bea menciona que compostan casi todo lo orgánico de la casa, incluyendo su cepillo de dientes, y también su pelo.