El sudafricano Michiel Heyns se basó en la vida de la secretaria de Henry James para escribir una novela por la que hace desfilar personajes reales de la vida literaria a principios del S. XX inglés: Joseph Conrad, Edith Wharton, los hermanos de James... Se trata, entonces, de una de esas novelas que recrean un momento histórico fundiendo datos auténticos con imaginación y ficción. El estilo no sólo es el de James, es casi su caricatura: algo que constituye una de las limitaciones del libro, y también uno de sus encantos.