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Los beneficios del amor entre un niño y su mascota

¿Estás pensando en tener una mascota para tus hijos y aún no te decides?

Es una gran responsabilidad, pero los beneficios son tremendos. La compañía de un animal mejora la calidad de vida de todo ser humano. Nuestra médico veterinario Margarita Adasme explica que "en general contribuyen a aumentar la longevidad de las personas, preservar el equilibrio físico y mental y reducir el estrés, entre otras ventajas".

"Sobre todo ahora en pandemia -agrega Margarita- hemos visto un incremento en las adopciones de mascotas, porque han sido un pilar fundamental para aquellas personas que han pasado mucho tiempos aisladas durante esta crisis sanitaria". 

En el caso de los niños, los beneficios son significativos. Margarita los detalla a continuación:

Desarrollan autoestima

En el caso de los niños, las mascotas pueden ayudar a desarrollar la autoestima mediante la reducción del estrés y los sentimientos de ansiedad. Eso sí, siempre es importante que cuando niños y animales estén juntos sea bajo la supervisión de un adulto porque las mascotas son animales que responden a instintos, entonces tenemos que enseñarles a tener un trato respetuoso con ellas, evitando a que jueguen de manera muy brusca, que les tiren la cola o las orejas.

Cultiva buenas relaciones

Los niños van a ser capaces de establecer buenas relaciones con otras personas porque van a saber crear vínculos afectivos. 

Calma a los pequeños

También contribuye a tranquilizar a los niños. Muchos estudios indican que los perros y gatos pueden ayudar a los niños hiperactivos o que tienden a conductas violentas a estar más tranquilos.

Ayuda a crear hábitos

Hasta los 3 años podemos fomentar el respeto básico hacia los animales, a establecer un vínculo afectivo respetuoso, que nos permita interactuar de manera calmada y cariñosa con la mascota, sin juegos bruscos.

En esta etapa también es importante enseñar a respetar los espacios del animal, por ejemplo, cuando está durmiendo, comienzo o haciendo sus necesidades. 

Aquí la máxima es una que nunca pasa de moda: "No le hagas a tu mascota lo que no te gustaría que te hicieran a ti".

Cuando el niño aprende desde muy pequeño a respetar a su mascota también aprenderá a respetar a las personas.

Entre los 3 y los 6 años ya se pueden pedir tareas simples -supervisadas por un adulto- como cepillarlo, ayudan a darle un baño, echarle el champú o enjuagarlo. Así el niño comenzará a sentirse más responsable sobre el cuidado de su mascota.

Entre los 6 y los 10 años, ya entienden cómo tratar a un animal sin hacerle daño. Pueden además hacerse cargo de tareas rutinarias como mantener sus platos con comida y agua fresca, darle premios para reforzar un hábito positivo (como hacer pipí en la caja de arena).

También ayuda a mucho a fortalecer este vínculo entre niño y mascota es hacer juguetes para el animal.

¡Un momento! ¿Cómo hacer juguetes para mascotas en tu casa, con materiales simples?

Preparamos algunos videos tutoriales que puedes ver aquí:

Juguete sustentable para perro

Juguete sustentable para gato